Aragón – Valle de Bujaruelo/Valle de Ordesa: ruta por el Bosque de Cobatar y despedida de la Pradera de Ordesa

El martes 24, después de haberme tomado el día anterior prácticamente de descanso (tan solo estuve un par de horas por el Bosque de la Pardina del Señor), me levanté decidido para acometer otra de las rutas que me hubiera gustado hacer dos años atrás: la ruta del Bosque de Cobatar en el Valle de Bujaruelo.

Así fue y nada más dejar el coche en las inmediaciones del Puente de Santa Elena vi que el río Ara corría salvaje. En esos momentos, ni imaginé que mi ruta iba a verse truncada una hora después.

El Salto del Carpín hizo que me parara a fotografiarlo antes de iniciar mi camino. Llevaba bastante agua debido a la lluvia que seguía acompañándonos día tras día.

Salto del Carpín
Salto del Carpín
Río Ara

La ruta por el Bosque de Cobatar nos lleva desde el Puente de Santa Elena hasta el Refugio de San Nicolás de Bujaruelo. Se trata de una ruta corta y sencilla.

Cartel indicativo

Nada más comenzar vi una pequeña ardilla cruzar mi camino, pero no me dio tiempo a captarla con la cámara. Seguí andando. El agua corría por todas partes, no solo por el río.

Río Ara a su paso por el Valle de Bujaruelo
Cascada en el Valle de Bujaruelo
Río Ara a su paso por el Valle de Bujaruelo
Cascada
Río Ara a su paso por el Valle de Bujaruelo

Hay un momento donde un puente cruza el río y puedes acceder a la pista que lleva hasta el refugio a través del coche. No obstante, decidí continuar mi camino por el margen del río que iba caminando. Mala decisión.

Indicaciones hacia el Camping de Bujaruelo
Puente sobre el río Ara
Abundante vegetación en Bujaruelo
Abundante vegetación en Bujaruelo
Por el sendero que lleva al refugio

Los torrentes de agua cada vez eran más abundantes en el camino, sin embargo, se podían cruzar sin ningún problema. El inconveniente vino cuando llegué a un punto donde el río corría con tanta fuerza que el camino desaparecía bajo sus aguas. Aquí paré a fotografiarlo y decidí darme la vuelta. Me dio rabia porque tan solo me quedaban unos 15 minutos para llegar al refugio.

Senda cortada por el río Ara
Senda cortada por el río Ara
Senda cortada por el río Ara
Mery, Pepe y Chewi
Mery, Pepe y Chewi

Al darme la vuelta pensé en cruzar el puente anterior hacia el Camping de Bujaruelo y volver hacia el Puente de Santa Elena. Luego, cogería el coche y subiría hacia el Puente de San Nicolás de Bujaruelo.

Volviendo sobre mis pasos
Hacia el Puente Los Abetos

Una vez cruzado el puente y estando ya en la pista, el paisaje era más abierto y me deleité fotografiando el río y las sucesivas cascadas que descargaban agua en él.

Río Ara
Río Ara
Cascada en Bujaruelo
Cascada en Bujaruelo
Río Ara

La subida en coche no fue larga. Me tomé un café en el refugio y luego me puse a fotografiar los alrededores, aunque ya tenía fotos de esta zona de hace dos años.

Puente de San Nicolás de Bujaruelo
Puente de San Nicolás de Bujaruelo
Refugio de Bujaruelo
Refugio de Bujaruelo
Río Ara a su paso por Bujaruelo
Río Ara a su paso por Bujaruelo
Río Ara a su paso por Bujaruelo
Mery, Pepe y Chewi en el Puente de San Nicolás de Bujaruelo
Chewi en el Puente de San Nicolás de Bujaruelo

A la vuelta ya con el coche, me paré a fotografiar una gran cascada que se veía de frente. Sinceramente, no me convencen mucho cómo han quedado las fotos.

Cascada en Bujaruelo
Cascada en Bujaruelo
Cascada en Bujaruelo
Cascada en Bujaruelo
Pico Otal nevado

Antes de abandonar definitivamente el Valle de Bujaruelo decidí pararme de nuevo a tirar fotos al Salto del Carpín.

Salto del Carpín
Salto del Carpín

Como aún era muy temprano decidí subir con el coche hasta la Pradera de Ordesa y comer en el restaurante. Antes de llegar hice alguna parada para captar las cascadas desde un mirador.

Cascada de Ordesa
Cascada de Ordesa
Cascada de Ordesa
Cascada de Ordesa
Cascada de Ordesa

Después de comer y antes de volverme al hotel hice las últimas fotos al Valle de Ordesa. Si dos días antes había estado en lo alto del Mirador de Calcilarruego mirando hacia la pradera, ahora tocaba alzar la vista hasta el mirador y pensar «sí, ahí subí yo el domingo».

Alzando la vista hacia el Mirador de Calcilarruego
Mirador de Calcilarruego
Peñones de Ordesa

Con mucha pena, pero sabiendo que si el dinero y la salud me lo permiten… volveré, me despedí del Valle de Ordesa de cara al Tozal del Mallo. Le hice algunas fotos y le tiré un beso con la mano de despedida. Nos volveremos a ver, viejo amigo.

Tozal del Mallo
Tozal del Mallo

Hasta aquí mis vivencias por el Valle de Ordesa y por el Valle de Bujaruelo. Fueron seis días ajetreados intentando cuadrar cada una de las visitas que se fastidiaban debido a la lluvia. Al día siguiente, tocaría cambiar de valle y visitar Pineta. Allí, me tomé el café con las vistas más espectaculares que uno puede ver en este valle sin apenas hacer esfuerzo.